11/03/2009 -
Con el objetivo de ofrecer una mejor calidad de vida, a un grupo de sanluiseños de bajos recursos, el Instituto de Estudios Económicos Sociales y Psicosociales (IESP) de la ULP, junto con el Instituto Superior de Estudios Paramédicos (ISEP) de Buenos Aires, lanzaron la campaña “Porque sonreír también es un derecho”.
El propósito del plan es brindarles a 50 personas la posibilidad de obtener una prótesis dental completa, en forma gratuita.
Diego Muñoz, coordinador académico del IESP, explicó que esta iniciativa es una prueba piloto que comenzó el 2 de marzo con la búsqueda y selección de pacientes, a quienes en el término de 7 días se les realizarán sus prótesis dentales y luego tendrán un tratamiento de 2 meses.
Además, señaló que se instalará un laboratorio en el predio del IESP donde profesionales del Instituto bonaerense realizarán la fabricación de las prótesis que serán aplicadas a los pacientes. Esta tarea estará a cargo de odontólogos del sistema de salud provincial, en las salas de atención médica de los barrios Las Américas, Tibiletti, San Martín, Primero de Mayo, en el hospital Cerro de la Cruz, y en el centro de salud De Los Tres barrios (Martín de Loyola, Justo Daract y Av. Presidente Perón).“Decidimos colocar las prótesis en las salitas de los barrios, porque muchas veces la gente de las periferias no puede trasladarse al Policlínico Regional de San Luis por cuestiones económicas.
Además, la gente genera un vínculo de familiaridad con el personal de las salitas, ya que allí llevan sus hijos a control y buscan la leche, entre otras cosas”, explicó Muñoz.Asimismo, indicó que este “es un beneficio al que van a acceder personas que, de otra forma no podrían realizar un tratamiento de salud bucal”, y además subrayó que “la higiene bucal es también una cuestión importante en las relaciones sociales al igual que la salud mental de las personas”.
Una intensa actividadLos profesionales del ISEP trabajan día y noche para cumplir con los objetivos de la campaña.
Se turnan para dormir y consiguen hacerlo sólo algunas horas.“La confección de una prótesis dental lleva aproximadamente un mes de trabajo en laboratorio. Por eso trabajamos concentrados en una jornada larga y comprimida.
Se vienen días difíciles, porque vamos a dormir entre dos y cuatro horas por día. Pero vale la pena, porque es muy gratificante ver salir sonrientes a personas que llegaron sin sus piezas dentarias”, expresó Rubén Muñiz, docente y técnico dental, miembro del ISEP.
El grupo de profesionales bonaerenses se encuentra instalado en un chalet del Instituto puntano, donde elaboran las prótesis de los pacientes.
El trabajo es minucioso.
En una primera instancia los odontólogos determinan si el paciente está en condiciones de colocarse la prótesis y corroboran que no tenga infecciones o enfermedades bucales. Luego el dentista acepta al paciente, le realiza un primer molde que es enviado al laboratorio y allí comienza la labor de los mecánicos dentales, que incluye cinco pasos y 250 procedimientos.
Muñiz señaló que “la gente piensa que tener una buena dentadura es algo estético y no dimensiona la importancia de esto”.
En relación a ello, explicó que “masticar los alimentos con todas las muelas ayuda a digerir mejor. Por lo tanto el sistema digestivo funciona bien”.“Al agregarse aquellas piezas dentales que faltan se logra que las propias duren mucho más tiempo.
Incluso es importante para las relaciones sociales ya que, en algunos casos, para conseguir trabajo es necesario tener la dentadura en buen estado”.Informes: ciu@ulp.edu.ar –Tel: (02652) 531525
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario